A nivel pedagógico nuestro proyecto es articulado e integral ya que involucra a todos los ciclos y cada una de las áreas del conocimiento, las que son reafirmadas por el proyecto Pastoral. Esta convergencia permite amortiguar los impactos del pasaje de ciclos.
Partimos del concepto de educación signado por el Ideario de la Congregación, cuya síntesis se expresa como la tarea de acompañar a las personas en su capacitación para realizarse en plenitud. Educar es acompañar el proceso de aprender a ser libre y a obrar rectamente.
Este acompañamiento consiste en perfilar, proponer y motivar a cada persona para que:
- Asuma las exigencias profundas de su ser.
- Escuche los llamados realistas de la hora que le toca vivir y responda a ellos.
- Elabore las convicciones básicas que sean la imagen conductora de su accionar en todo momento de la vida.
- Descubra y realice su propio proyecto de vida.
Este acompañamiento implica respetar, promover y garantizar la capacidad que tiene cada persona para autoconducir y perfeccionar su vida a partir de la aceptación de la verdad sobre sí mismo.
La educación así entendida se caracteriza por ser:
- Integradora: De todas las dimensiones en la unidad de la persona. Centrada en promover y llevar a madurez todas las notas constitutivas de la persona.
- Personalizadora: Acompaña para que la persona oriente todo lo que es y todo lo que le sucede hacia el sentido de su vida, incorporando a su conducta actitudes y virtudes como la veracidad, la honradez, la solidaridad.
- Liberadora: La educación es el camino para incorporar la libertad al sentido de la vida. Educar es ayudar al hombre a superar sus esclavitudes y sus miedos a la libertad. La educación ayuda a valorarla libertad como un don recibido de Dios y a comprometerse en una tarea liberadora de los condicionamientos interno y externos que le impiden desarrollar sus potencialidades y dar sentido a su vida.
- Generadora y transmisora de la cultura: Comunica la cultura de forma sistemática y crítica. Implica a la persona en el patrimonio cultural elaborado por las generaciones pasadas, la hace generadora de nuevos valores culturales y le va creando una conciencia crítica frente a los riesgos que amenazan con destruirla.
- Creadora de comunidad: La educación acompaña a la persona para que realice su libertad y así cree ámbitos de comunión, donde se viva la originalidad personal en profunda interacción con otras personas.
Desde el punto de vista pedagógico, esta educación debe estructurarse en torno a cuatro aprendizajes:
- aprender a conocer (instrumentos para la comprensión)
- aprender a hacer (para influir sobre el propio entorno)
- aprender a vivir juntos ( participar y cooperar con los demás)
- aprender a ser